La realidad post pandemia muestra que los llamados trabajadores sin escritorio (Deskless workers) conforman ya el 80 por ciento de la fuerza laboral general y la tendencia irá al alza. La vuelta a las oficinas ha planteado en muchos lugares turnos rotatorios y en otros ha dejado a los empleados que decidan cuándo trabajar en casa, fijando, eso sí, días de encuentro en la oficina para fomentar el desempeño en equipo.
Ante ese escenario los retos ahora son múltiples a la hora de buscar un equilibrio dentro del modelo de trabajo híbrido que se impone. Esto plantea a las organizaciones varios desafíos que por un lado apuntan a la productividad y de otro a la felicidad del propio trabajador frente a un entorno VUCA (Volatil, complejo e incierto).
Tecnología para empoderar y habilitar a los empleados
El más importante es el papel que juega la tecnología para empoderar y habilitar a los empleados, lo que se traduce en la necesidad hoy en todas las empresas de dotar al trabajador de aquellas soluciones que faciliten el acceso a la oficina desde cualquier lugar.
Hablamos de soluciones de gestión de contenido empresarial en remoto para tener una adecuada gestión documental, hasta la urgente necesidad de habilitar intranet o escritorios virtuales.
Todo ello reclama una política adecuada de ciberseguridad para proteger todas las comunicaciones e información corporativa clave frente al uso no autorizado de terceros.
Pero además conviene facilitar la comunicación, no solo con los miembros del mismo equipo sino con los clientes ya que estos se están acostumbrando al soporte digital como elemento de conexión gracias a la incorporación de sofisticados sistemas de videoconferencia, pero también a uso de pantallas digitales interactivas.
Pero para llevar a cabo una gestión del cambio óptima se requiere de una estrategia corporativa donde el secreto para mantener productivos y felices a los trabajadores sin escritorio radica en la flexibilidad, huyendo de la rigidez, para abrazar nuevas formas donde se priorice la experiencia de empleado para retener talento, ya que el modelo híbrido aumenta la felicidad de los empleados y proporciona mayor productividad y reduce costes.
Conexión, versatilidad y seguridad
El trabajador del futuro es conectado, versátil y seguro, pero también deslocalizado. Esto señala al binomio persona y tecnología, y también a la capacidad de gestionar e interactuar con las nuevas soluciones acuñándose ahora un concepto nuevo: (ciber) excelencia. Así lo apunta en su último informe de la Fundación COTEC, donde se resalta la necesidad que tienen las compañías de adaptarse y apostar por la innovación tecnológica como vía para hacer frente a la digitalización creciente.
El denominado Desklees workers también se mide por objetivos, pensamiento crítico y capacidad para tomar decisiones y espíritu colaborador. “Lo venidero – como se señala el informe COTEC- es el trabajador (ciber)reforzado, aquel que incrementa sus competencias gracias a tecnologías habilitadoras mediante nuevos programas informáticos y tecnologías IA que permiten rediseñar flujos de trabajo, revisar la asignación de tareas y mejorar el diseño de puestos de trabajo con el objetivo de aumentar la productividad”.
El horizonte más cercano apunta a la convivencia de robots y humanos, lo que generará efectos positivos para la competitividad de las empresas pronosticándose mejoras en la productividad del 30 por ciento en los próximos años.
Tener una adecuada gestión del cambio será clave seguir manteniendo altos niveles de eficiencia frente a los Deskless workers. En Korporate desarrollamos y aplicamos tecnología inteligente, asequible y fácil de utilizar para mejorar la calidad de vida en el trabajo de las personas. ¡Consúltanos! #beDIGITALbeHAPPY.